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El ego, esa voz que nos destruye… ¿Cómo mandarlo al diablo?

¿Quién de ustedes siente que ya no puede más con su ego? ¿Quién se siente una completa víctima de él?

abril 25, 2018

Vanessa Coppel
Licenciada en Relaciones Internacionales por el TEC de Monterrey campus Monterrey con especialidad en Literatura y Letras y Creación Literaria. Terapeuta en Adicciones por Fundación Oceánica y especialista en Desarrollo Humano.
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vanessacoppel@gmail.com

¿Qué es el EGO?

• El ego es esa voz que escuchamos constantemente y que nos quiere hacer sufrir.
• A veces, algunas personas no saben de dónde viene su infelicidad, porque no están conscientes de cómo pelear con esa voz; pararla, callarla y hasta discutir con ella para no permitir que nos frustre y tire nuestro ánimo, nuestra autoestima y nuestra felicidad.

¿Cómo se manifiesta el EGO?

• En Opiniones
• Juicios o creencias que asumimos de facto como la verdad absoluta y nuestras reacciones correspondientes.

¿Cómo consumimos ego?

• Pensando tonterías, todo el día sin descanso.

¿Cómo vemos el ego puesto en nuestro cuerpo?

• Rigideces
• Clichés de conversación
• Tics
• Reacciones
• Incongruencias
• Insatisfacción
• Anhelos
• Deseos
• Urgencias, etc.

Ojo con tu Ego

¿Qué dice el EGO y cómo lo dice?

• Yo creo…
• Yo opino…
• Yo pienso…
• Si me preguntaras a mí…
• A mí me dijeron…
• Me consta…
• Ya te diste cuenta que…

Herramientas para detectar la voz del ego y dejar pasar la presión

• Auto-observación constante para que efectivamente puedas observar lo que estás pensando, prever tu reacción típica y parar en seco.
• Es como tener comezón y no rascarse.

Nuestra capacidad para responsabilizarnos y parar.

Trastorno de Personalidad: Narcisismo

• Identificar la presencia del ego en el cuerpo, pausar, ósea respirar y esperar, observar y no reaccionar, hacer algo diferente y hacer de eso una forma de vida.

¿Cómo mandar el EGO al diablo?
1. Aceptar que existe.
2. Auto observación constante.
3. Escucharlo sin juzgarlo.
4. Hablarle en voz alta mientras se asume distinto a ti.
5. Dejas de sentirte su víctima.
6. Te haces responsable de tus reacciones o respuestas.
7. Lo dejas acompañarte.
8. Con paciencia lo entrenas.
9. Se asumen pareja para siempre.
10. Te aceptas y lo aceptas como es.

abril 25, 2018