Ellas dicen:
– Cuando tengas a tus hijos te vas a acordar de mí
– ¡Esa muchachita no te conviene!
– ¡Ahorita que llegue tu papá arreglamos cuentas!
– ¡Eres idéntico a tu padre!
– ¡Un día me van a matar de un coraje!
– ¿Qué creen que estoy pintada o qué?
– ¿Qué creen que soy su sirvienta?
– ¡Mira nada mas cómo vienes!
– ¡Arregla tu chiquero!
– ¿Qué, tus amigos no tienen casa?
– ¡Vete por las tortillas!
– ¡Te dije cilantro!
– ¡Esto me va a doler más a mí que a ti!
– ¡Llévate suéter!
– Un día de estos se levantan y no me van a encontrar, y a ver qué hacen…
– Como aquí tienen a la ‘sirvienta’ que les hace todo…
– Todo lo que me he sacrificado por ustedes y miren cómo me pagan
– ¿Ese es el ejemplo que le das a tus hermanos?
– Uno les contesta el teléfono y ni siquiera dicen buenos días o por favor.
– Usted no se manda solo, cuando trabaje y se mantenga, hablamos
– Mientras vivas en esta casa, haces lo que yo diga
– Pero si se acaban de ver, no entiendo por qué siguen hablando por teléfono
– Es mejor que vayas comido, porque no sabes con qué te van a salir
– Para que me hagan un favor hay que arrodillarse, en cambio viene cualquiera de la calle y salen corriendo
– Primero tuviste madre y después novia
– Porque soy tu madre ¡y punto!
– Te voy a dar una razón para que llores con ganas
– ¿Ves cómo me tratas? Yo que te cargué nueve meses y te parí, ¿y así me pagas?
– Aquí no es restaurante para que comas lo que quieras
– ¿Crees que esto es un hotel de paso para que puedas llegar a la hora que se te da la gana?
– Ahora resulta que los pájaros le tiran a las escopetas
– Si fulanito se arroja al precipicio, ¿tú también?
– ¿Vienes, o voy y te traigo de las puras orejotas?
– ¿Qué te quieres ir de la casa? ¡Lárgate a ver quién te mantiene!
– Limpia bien eso o hago que lo limpies con la lengua
– Si no te quisiera, no te diría estas cosas
– Vaya pregúntele primero a su papá, a ver él qué dice
– ¡Con usted todo es una lucha!
– Estas no son horas de llamar a una casa decente
– Me puedo estar muriendo y ustedes no le pasan a uno ni un vaso de agua
– No les habremos dado lujo ni riqueza, pero les dejamos estudio.
– En la calle son solo risas y en la casa todo les molesta
– El día que me convierta en un estorbo y en una carga para ustedes van y me tiran a un asilo
– Creen que porque ya dan algo en la casa pueden tratarlo mal a uno
– Hasta la una, ni un minuto más
– Todo te entra por una oreja y te sale por la otra
– ¿Por qué me castiga dios con estos hijos?
– Que sea la última vez!!
– Yo soy tu madre y me puedo meter si quiero
– No me conteste así. No soy tus amigas eh! A mi no me hablas en ese tonito.
– Prepara tu mochila! , Prepara tu mochila es la última vez que te lo digo.
– Cuando yo tenía tu edad…
