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¿Hablar de Amor? O de amores

Si ya están en el mood de empezar a escribir la historia de la vida que quieren, ¿Qué onda con el amor? ¿Cómo escribimos nuestra historia ideal?

septiembre 6, 2018

Tere Díaz

Psicoterapeuta, especialista en desarrollo personal
TW: @tedisen
terediaz.com
FB: Tere Díaz Psicoterapeuta

  • El amor es un concepto, una idea, y si lo buscamos sin precisar que queremos o necesitamos nos estrellaremos antes que después con la realidad.
  • Si no tenemos claro lo que esperamos de una relación y concretamos el tipo de amor que queremos, necesitamos, nos interesa, valoramos o anhelamos en determinado momento de la vida, será muy difícil concretar una relación, o sostenerla, incluso disfrutarla…
  • No todos están necesariamente en el canal que tú quieres en temas de sexo, amor y vida de pareja. Ya lo dice Robert Sternberg, psicólogo e investigador estadounidense, “el amor es como una historia”, y las historias tienen, guiones – lo que tiene que suceder – y tramas – el significado de eso que está sucediendo ¿Cómo distinguir el guión de la otra persona para no intentar cambiarlo o forzarte tú a cambiar?
  • La compatibilidad y duración de una relación depende en gran parte de la afinidad del proyecto amoroso de cada uno de los actores que actuarán en esta nueva historia de amor.
  • Ahí te van algunas preguntas para que tengas clara la historia que quieres escribir, y estés atenta a descubrir si ésta tiene que ver con la historia de quién está sentado frente a ti.

¿Buscas iniciar una vida autónoma?

  • Quizás te urge salir de casa de tus padres, o del depa de tus roomies.
  • Sería afín a ti alguien que quiera empezar una vida más libre y que no tenga que ajustarse a los parámetros de su propia familia de origen o bien de un grupo de amigos con quien tiene que coordinar las decisiones de su vida cotidiana.
  • La pareja que quieres ha de aportarte libertad a tu vida, oportunidades de crecimiento y un pase a la verdadera “adultez”.
  • Quien esté claro de esta etapa importante para “dar el salto a la vida real”, estará dispuesta a vivir contigo las peripecias, restricciones y retos de conquistad la libertad.

¿Quieres formar una familia?

  • Para lograrlo el esquema más usado es el de vivir juntos y generar un espacio seguro para construir un hogar.
  • Quizás incluso te daría seguridad tener “papelito” de por medio por si está en tu horizonte un futuro con hijos.
  • Recuerda que este esquema incluye generalmente vida compartida con familias extensas también.
  • Este tipo de relación requiere de mucho compromiso, pues construir una familia con infantes implica estabilidad y seguridad para hacerte esposa y mamá.
  • Habrá que ver que el susodicho esté interesado en compartir contigo intimidad y compromiso, para tener claras las reglas del juego, así como llegar a acuerdos concretos, convenientes y explícitos que sienten la plataforma de tu nuevo hogar.

¿Priorizas una experiencia erótico afectiva de sexo y pasión?

  • Es importante encontrar a alguien que de importancia al placer, el erotismo, y a la sensualidad.
  • Que le sea más importante la relación intersubjetiva de hombre y mujer, que la vida familiar y la maternidad/paternidad; una persona que no esté llena de problemas y compromisos familiares que lo demanden en exceso – en tiempo y cuerpo – y que quiera disfrutar de cierto engolosinamiento romántico.
  • Debes ser clara al explicar que no quieres un exceso de responsabilidades hogareñas, quizás tampoco deseas compartir un hogar porque sabes que lo cotidiano disminuye el deseo y la intensidad de la sexualidad.
  • Tengas o no tengas hijos, esto de tener más hijos no es algo que quieras vivir con tu nuevo amor.
    Requieres alguien que tenga experiencia y seguridad en su desempeño amoroso y sexual y que busque también el vínculo que produce el buen sexo y la pasión. ¿Será que prefieres “arder que durar” con amor “eléctrico”?

¿Necesitas una relación de socios?

  • A veces uno tiene proyectos inconclusos que requieres acometer y terminar, para lo que existen “partners” te aportan a la idea algo que tú no tienes: orden, estabilidad, diversión, acompañamiento, fuerza, creatividad, o alguna competencia en particular.
  • Hay ocasiones en la vida que uno tiene claro que para lograr algún proyecto personal le hace falta un compañero que lo impulse, con valentía, decisión y arrojo.
  • ¿Hacer estudios fuera? ¿Poner un negocio? ¿Terminar un post grado? ¿Comprar una propiedad? ¿Lanzar un nuevo producto al mercado?.
  • Andas tras una especie de socio que sume a tus fuerzas y a tus competencia para alcanzar ese escalón “vital” de manera divertida, con mayor aprendizaje y algo menos de riesgo y esfuerzo.

¿Te gustaría tener un compañero/amigo para la vida?

  • Alguien tranquilo, que te ofrezca un tipo de amor confiable y de amistad.
  • Si bien no es un amor tan intenso porque el erotismo y el sexo no te son tan centrales, quieres que te ofrezca estabilidad y respeto, que sea más realista y menos demandante, una buena y cálida compañía.
  • Alguien que no interfiera en tus proyectos personales, ni que esté al “pie del cañón” apoyando tus logros, pero que te ofrezca conversación y compañía.
  • No esperas maravillas ni milagros, sino paz y acompañamiento, y eso mismo ofreces tú. Priorizas un grado suficiente de relajación y confort: sentirte cómodo, sentirte “en casa”.

Quizás estás lista para escribir la historia de un amor altruista:

  • Más centrado en el otro y en el deseo de ayudarle a satisfacer sus necesidades, o tú de satisfacer las suyas.
  • ¿Hoy necesitas a alguien que te cuide o estás lista para dar y cuidar a otro? Tal vez estás saliendo de alguna etapa de vida complicada y difícil, y si bien las has superado y acomodado, estás con pocas fuerzas para esforzarte y arriesgar de más.
  • Quieres alguien que quizás esté en proceso de recuperación también, con una vida hecha, con cierta libertad, pero que puedan juntos sostenerse y acompañarse en su recuperación de manera amorosa y sostenedora.
  • Escucharse, entenderse, apapacharse, contenerse mutuamente, será el núcleo de retomar un equilibrio en la vida de los dos.

¿Buscas alguien que te complemente?

  • Existen amores muy complementarios, donde alguien cuida y otro es cuidado, alguien enseña y otro aprende, alguien controla y otro deja que le ordenen la vida.
  • Puede ser que te des cuenta de algo que no tienes y que necesitas que alguien te aporte para sumar en tu vida: desde dinero, hasta una gran familia, desde capacidad de socializar, hasta un optimismo crónico

¿Buscas un amor práctico?

  • Ves a la pareja de manera realista y puedes decidir de manera racional con base en afinidades: similares en religión, ideología política, manejo del dinero, ideas de creencias sobre la educación de los hijos (si los van a tener), tareas de la casa, gustos e intereses, así como aficiones.
  • Entonces se elige amar a alguien literal, muy afín, con quien hagas “match”.

¿Deseas una relación con alguien soñador?

  • Estás lista para romper esquemas, prejuicios sociales y cambiar de paradigmas. Deseas a alguien que te ayude a salir de un estilo de vida convencional que hoy te aprieta y limita.
  • Quieres que tu pareja se juegue contigo para explorar creencias, caminos, y conductas nuevas, para cuestionar patrones aquilosados y construir un proyecto nuevo que desafíe tus esquemas añejos.
  • Adelante, checa que sea alguien poco convencional y rígido, y que junto contigo esté dispuesto a transgredir y a experimentar.
  • Sea cual sea la historia que quieras escribir, checa tu candidato ha de dar muestras de una madurez suficiente.
  • Una pareja equilibrada – sea cual sea la historia que pretenden lograr – se constituye de dos personas completas y contentas con ellas mismas, independientemente del desafío y etapa de vida que estén atravesando.
  • Así, el encuentro será para compartir su abundancia – sea cual sea la que hayan conquistado –. Una relación desde este lugar abre puertas a los dos, responde al momento presente, y el amor que se tengan aportará madurez a los dos.

septiembre 6, 2018